El 1º del mundo, Jannik Sinner tenía un duelo contra el local Alex de Minaur por cuartos de final del major australiano, el italiano apabulló sin zozobras a su oponente por 6-3/6-2/6-1.
Pronto llegaron las primeras bolas de rotura para el número uno. Un largo intercambio acabó con una derecha larga del australiano y Sinner se puso por delante 3-1. La traducción fue casi inmediata: victoria en el primer set.
El italiano empezó el segundo parcial con otro break. De Minaur siguió centrado y a lo suyo, pero no bastaba. Pese a estar en uno de los mejores momentos de su carrera y demostrarlo con una elección acertada de los golpes, De Minaur se encontró frente a una máquina con una raqueta en la mano.
Comodísimo al saque, en ese set Sinner también estuvo por delante en algún momento de todos sus juegos al resto. Tras otra rotura, cerró la manga con un juego en blanco. Habían pasado una hora y veinte minutos de partido y Sinner estaba a solo un set de las semifinales.
Con el 4-0 hizo entender al público de la Rod Laver que debían ir pensando en marcharse a casa. El juego que se anotó a continuación a De Miñaur fue el último antes de su despedida del Australian Open. Se fue con un saldo de 10 golpes ganadores en todo el partido, por 27 de su rival.
Sinner igualó con esta victoria a un mito del tenis italiano, Nicola Pietrangeli, con cinco apariciones en semifinales de Grand Slam. Un récord nacional que, si juega como este miércoles, Sinner no tardará en batir.