Por Gabriel Moya / Fotografía: Unión Española Oficial

En duelo de equipos dolidos, que venían de quedar fuera en primera fase de Copa Sudamericana, los de Cesar Bravo vencieron y de paso se desquitaron de la goleada sufrida en Chillan el año pasado.

 

Duelo jugado este lunes y que cerraba la 7ma fecha del torneo nacional. Los de Jaime García llegaban como el único invicto del torneo, con la chance de alcanzar la punta si es que se llevaba los tres puntos de Santa Laura.

 

Pero la historia fue diferente a las intenciones chillanejas, pues los hispanos demostraron tener muy bien estudiado el partido, plantearon un juego asfixiante desde los primeros minutos, dejando sin espacio a los valuartes del mediocampo de Ñublense, Matias Moya y Federico Mateos.

 

Con Patricio Rubio y Alexander Aravena náufragos entre los centrales, Unión se instalo en terreno contrario encontrando el gol a los 20′ minutos en los pies de Vicente Conelli (19), que marcó su primer gol en primera división, definiendo a boca de jarro tras buen pivoteo de Norambuena.

 

Ñublense tuvo el empate a los 37′, con gol anulado a Bernardo Cerezo que se encontró con un balón servido en el segundo palo vía tiro libre, pero que estuvo viciado por un pivoteo de Vargas que lo dejaba fuera de juego.

 

En el segundo tiempo Unión esperó a la visita en propio terreno, destacando el trabajo de Espinoza, Fernández y Magnasco que imposibilitaron el avance de los chillanejos, permitiendo que en velocidad Jaime y Yáñez que entraron desde la banca marcaran diferencias.

 

Sobre el final un extraño cobro del juez Rodrigo Carvajal, desestima penal sobre Patricio Rubio por posición fuera de juego, pero es llamado por el VAR debido a la magnitud de la jugada, lo que sugiere expulsión según protocolo VAR, pero decide colocar solo tarjeta amarilla al portero.

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